dicho- a lo que Burga a convertido en su empresa.Ecuador vino, en teoría, en condición de visitante y favorito pero logro revertir lo primero y aseverar lo segundo. Los ecuatorianos se sintieron como en casa, ganaron en cada enfrentamiento que se tuvo ese domingo en nuestra propia tierra.
En la cancha se sufrió la derrota mas patética de aquel día dejando como masoquismo el único calificativo para los mas de 20 mil hinchas que intentaron llenar las tribunas del monumental pero fueron opacados por los festejos de una hinchada que logra ver progreso, garra y fútbol en su selección.
En la sala de conferencias los hinchas contenidos por su carnet de prensa y su golpeado orgullo tuvieron que resignarse a escuchar las arengas de sus colegas ecuatorianos que viven la emoción de ganar como visitante y la adrenalina de poder llegar a un mundial
Y después de esto, quien que guste del fútbol podrá negar que cuando pierde la selección perdemos todos.
Continuará... (aun la agonía es larga)
1 comentario:
Creo que lo peor fue la falta de ganas. Si encima que son malos no quieren jugar.... ya no sé qué pueden reclamar.
Publicar un comentario